Según las dogmas Añü, el reconocimiento de Hijo Ilustre se le otorga a una persona, que además de no pertenecer a su etnia, es la indicada para representarlos fuera de ella; es decir, se hace merecedor a ese crédito quién por su generosidad, servicio y prestancia logra cautivar la atención y el corazón de su comunidad, como lo cuenta la Señora Laura Semprún, representante de esa colectividad, y aunque parezca mitológico, ¿los dioses son los que nos indican, quien es merecedor de ese credo¿.
Para el próximo mes de junio tendremos la visita de ciento veinte niños de las escuelas antes citadas, con la finalidad de hacer una visita guiada por las instalaciones del Poder Judicial, lugar donde simularán juicio oral.
|