REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

EN SU NOMBRE:
JUZGADO SEGUNDO DE PRIMERA INSTANCIA DE JUICIO DEL TRABAJO
DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ZULIA
Maracaibo, quince (15) de julio de dos catorce (2014)
204º y 155º

NUMERO DEL ASUNTO: VH02 -X-2014-000030

PARTE SOLICITANTE: Ciudadanos ALEJANDRA CAROLINA GORDONES MEDINA y CARLOS ALBERTO FEREIRA MEDINA, mayores de edad, titulares de las cédulas de identidad Nros. 17.738.330 y 17.918.923, respectivamente, domiciliados en el Municipio Maracaibo del Estado Zulia.
ABOGADO ASISTENTE: Ciudadano RICARDO IVAN GORDONES MEDINA, abogado en ejercicio inscrito en el Inpreabogado bajo el N°. 85.258.
MOTIVO: RECURSO DE NULIDAD ACTO ADMINISTRATIVO.

ANTECEDENTES
Mediante escrito presentado en fecha primero (1°) de julio de 2014, por los ciudadanos ALEJANDRA GORDONES y CARLOS FEREIRA, debidamente asistidos por el abogado RICARDO GORDONES, fue interpuesto Recurso Contencioso Administrativo de Nulidad contra el Acto Administrativo de efectos particulares dictado por el Inspector del Trabajo del Municipio Maracaibo, Providencia Administrativa N° 0014-2013, de fecha 23 de enero de 2013, contenida en el expediente N° 042-2011-01-1526, que declaro “SIN LUGAR, la solicitud de Reenganche y Pago de Salarios Caídos por ellos incoada en contra de la Sociedad Mercantil REPORT ZULIA AGENCIA DE NOTICIAS, C.A. conjuntamente con la Solicitud de Medida Cautelar Innominada de Suspensión de Efectos del referido acto administrativo.

Así pues, siendo la oportunidad procesal correspondiente, pasa éste Juzgado a pronunciarse acerca de la medida cautelar solicitada, para lo cual observa previamente:

DE LA PRETENSIÓN DE LA RECURRENTE:

La parte recurrente, fundamenta su solicitud en los siguientes alegatos:

Manifiesta actuar bajo el FOMUS BONIS IURIS, el cual según su decir se constituye cuando acreditan que la demanda de nulidad propuesta tiene indicios o probabilidades de éxito, observándose dentro de un juicio de verosimilitud que existen elementos probatorios que le otorgan al recurso propuesto Olor a Buen derecho, ya que acompañan a su recurso con las copias certificadas elementos probatorios que constatan indiciariámente la probabilidad de procedencia de las denuncias formuladas, en virtud de haber cometido la Providencia Administrativa Impugnada violación manifiesta a una norma jurídica expresa contenida en la Ley Sustantiva Laboral, el Código de Procedimiento Civil y que dentro del marco de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela hace presumir prima facie, las probabilidades de éxito del presente Recurso de Nulidad.

Por otra parte señala que bien conoce esta sentenciadora los graves perjuicios que por la definitiva les causarían a sus derechos como trabajadores al ser conculcados en todo momento por el acto administrativo que se recurre los salarios dejados de percibir además de los beneficios económicos y laborales que han sido vulnerados, enfatizando que ciertamente existen fundados elementos que crean presunción de certeza de la obtención de un fallo favorable en la presente causa que conllevaría a la nulidad de la providencia administrativa impugnada, por lo que según su decir no existe la menor duda de que la permanencia de los efectos del Acto Administrativo les causa un daño irreparable materializándose el PERICULUM IN MORA ante una eventual insolvencia de la accionada por el tiempo ya acontecido dentro del tiempo que ha durado el acto recurrido.

CONSIDERACIONES PARA DECIDIR

Estando en tiempo hábil, y determinada como se encuentra la competencia realizarse bajo el criterio de la competencia establecido por, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en sentencia Nº 9555, de fecha 23 de septiembre de 2010, que estableció que corresponde a éstos Tribunales de Primera Instancia Laboral conocer de los recursos contenciosos administrativos de nulidad que se propongan contra las Providencias Administrativas emanadas de las Inspectorías del Trabajo de la Región respectiva, este Juzgado pasa a pronunciarse sobre la medida de suspensión de efectos solicitada por la parte recurrente, bajo las siguientes consideraciones:

En fecha 16 de junio de 2010, entró en vigencia la Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa, publicada en la Gaceta Oficial N° 39.447 de la misma fecha, la cual en su artículo 104 establece:

“Artículo 104: A petición de las partes, en cualquier estado y grado del procedimiento, el tribunal podrá acordar las medidas cautelares que estime pertinentes para resguardar la apariencia del buen derecho invocado y garantizar las resultas del juicio, ponderando los intereses públicos generales y colectivos concretizados y ciertas gravedades en juego, siempre que dichas medidas no prejuzguen sobre la decisión definitiva.
El tribunal contará con los más amplios poderes cautelares para proteger a la Administración Pública, a los ciudadanos o ciudadanas, a los intereses públicos y para garantizar la tutela judicial efectiva y el restablecimiento de las situaciones jurídicas infringidas mientras dure el proceso (…)”.

Precisado lo anterior, en contraposición a la pretensión de la parte recurrente, orientada a que se materialice la suspensión de los efectos de la providencia administrativa Nº 0014-2013, de fecha 23 de enero de 2013, expediente administrativo N° 042-2011-01-01526, tramitado por ante la Inspectoría del Trabajo del Estado Zulia, la cual declaró “SIN LUGAR, la solicitud de Reenganche y Pago de Salarios Caídos por ellos incoada en contra de la Sociedad Mercantil REPORT ZULIA AGENCIA DE NOTICIAS, C.A.

Ahora bien, la norma prevista en el aparte 21 del artículo 21 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia de la República Bolivariana de Venezuela, aplicable supletoriamente de conformidad con lo establecido en el artículo 31 de la nueva Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa, dispone: “El Tribunal Supremo de Justicia podrá suspender los efectos de un acto administrativo de efectos particulares, cuya nulidad haya sido solicitada, a instancia de parte, cuando así lo permita la Ley o la suspensión sea indispensable para evitar perjuicios irreparables o de difícil reparación por la definitiva, teniendo en cuenta las circunstancias del caso. A tal efecto, se deberá exigir al solicitante preste caución suficiente para garantizar las resultas del juicio.”

En ese sentido, colige quien decide, que la suspensión de efectos de los actos administrativos a que se refiere el aparte 21 del artículo 21 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia de la República Bolivariana de Venezuela, reproducción integra del contenido del artículo 136 de la derogada Ley Orgánica de la Corte Suprema de Justicia, constituye una medida preventiva establecida por nuestro ordenamiento jurídico, mediante la cual, haciendo excepción al principio de ejecutoriedad del acto administrativo, consecuencia de la presunción de legalidad, se procura evitar lesiones irreparables o de difícil reparación al ejecutarse una eventual decisión anulatoria del auto, porque ello podría constituir un atentado a la garantía del derecho fundamental de acceso a la justicia y al debido proceso, en este sentido, debe el Juez velar porque su decisión se fundamente no sólo en un simple alegato de perjuicio, sino en la argumentación y acreditación de hechos concretos de los cuales nazca la convicción de un posible perjuicio real y procesal para el recurrente.

Por tanto, la medida preventiva de suspensión procede sólo cuando se verifiquen concurrentemente los supuestos que la justifican, esto es, que la medida sea necesaria a los fines de evitar perjuicios irreparables o de difícil reparación, o bien para evitar que el fallo quede ilusorio, y que adicionalmente resulte presumible que la pretensión procesal principal resultará favorable, a todo lo cual debe agregarse la adecuada ponderación del interés público involucrado; significa entonces que deben comprobarse los requisitos de procedencia de toda medida cautelar: el riesgo manifiesto de que quede ilusoria la ejecución del fallo y la presunción grave del derecho que se reclama. Quede así entendido.

En efecto, el correcto análisis acerca de la procedencia de la medida cautelar solicitada, requiere además de la verificación del periculum in mora, la determinación del fumus boni iuris, pues mientras aquél es exigido como supuesto de procedencia en el caso concreto, ésta, la presunción grave de buen derecho, es el fundamento mismo de la protección cautelar, dado que en definitiva, sólo a la parte que beneficia le derecho en juicio, pueden causársele perjuicios irreparables que deben ser evitados, emanen de que la contraparte o sean efecto de dilatación procesal. Consecuentemente, el referido principio se encuentra necesariamente comprendido en las exigencias del aparte 21, del artículo 21 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de la República Bolivariana de Venezuela para acordar la suspensión de efectos, cuando alude la norma en referencia a que la medida será acordada “teniendo en cuenta las circunstancias del caso”.

Establecidos los anteriores lineamientos, pasa este Juzgado a verificar su cumplimiento en el caso concreto, observando a priori, que la parte recurrente a fin de sustentar su pretensión cautelar, señaló como fumus boni iuris“ la existencia de un denominado olor a buen derecho puesto que de las pruebas acompañadas al recurso de nulidad y que fundamentan la impugnación del acto administrativo por vicios de nulidad absoluta, desprendiéndose probabilidades ciertas de procedencia de las denuncias formuladas.

Al respecto, el artículo 588 del Código de Procedimiento Civil prevé:

“Artículo 588-En conformidad con el artículo 585 de este Código, el Tribunal puede decretar, en cualquier estado y grado de la causa, las siguientes medidas:
1º El embargo de bienes muebles
2º El secuestro de bienes determinados;
3º La prohibición de enajenar y gravar bienes inmuebles Podrá también el Juez acordar cualesquiera disposiciones complementarias para asegurar la efectividad y resultado de la medida que hubiere decretado
Parágrafo Primero: Además de las medidas preventivas anteriormente enumeradas, y con estricta sujeción a los requisitos previstos en el Artículo 585, el Tribunal podrá acordar las providencias cautelares que considere adecuadas, cuando hubiere fundado temor de que una de las partes pueda causar lesiones graves o de difícil reparación al derecho de la otra. En estos casos para evitar el daño, el Tribunal podrá autorizar o prohibir la ejecución de determinados actos, y adoptar las providencias que tengan por objeto hacer cesar la continuidad de la lesión… omisis” .

Por otra parte, reza el artículo 585 del Código de Procedimiento Civil:

Artículo 585.- Las medidas preventivas establecidas en este Título las decretará el Juez, sólo cuando exista riesgo manifiesto de que quede ilusoria la ejecución del fallo y siempre que se acompañe un medio de prueba que constituya presunción grave de esta circunstancia y del derecho que se reclama.

Hilado a lo anterior, destaca esta Juzgadora que en el caso de autos fue presentada solicitud de medida cautelar de forma conjunta al recurso de nulidad, a fin de que se suspendan los efectos del acto administrativo impugnado, y siendo que esta última constituye la medida cautelar típica de dicho recurso, se estima que lo pretendido por los apoderados judiciales de la recurrente es solicitar la suspensión de los efectos del acto impugnado.

Establecido lo anterior, se observa que los recurrentes, no esgrimen argumentos en su recurso que de manera verosímil activen la presunción grave de buen derechos, o en su defecto el temor fundado de que se pueda causar un daño irreparable, por lo que, al analizar tales alegatos se observa que los recurrentes en el presente caso, no fundamentaron el requisito de procedencia referido al fomus bonis iuris, en los alegatos y denuncias que fundamentan la impugnación del acto recurrido y en la trascripción de los artículos 588 y 585 del Código de Procedimiento Civil.

En tal sentido, destaca en primer lugar esta operadora de justicia, que las medidas cautelares en el proceso contencioso administrativo, también poseen carácter instrumental, en consecuencia, el solicitante debe lograr a través de la argumentación y acreditación de hechos concretos, la convicción del Juez que de un estudio de probabilidades su pretensión será favorecida en la sentencia de fondo (presunción grave de buen derecho); asimismo; no puede dejar de observar esta Juzgadora que un pronunciamiento sobre dichos alegatos en este momento constituiría un pronunciamiento anticipado sobre el mérito de la causa o un adelanto de opinión sobre el fondo del recurso principal, e implicaría una análisis exhaustivo de las pruebas cursantes en autos, lo cual no resulta oportuno en esta etapa del proceso; en consecuencia, resulta forzoso para esta Juzgadora declarar improcedente la medida cautelar solicitada por los ciudadanos ALEJANDRA CAROLINA GORDONES MEDINA y CARLOS ALBERTO FEREIRA MEDINA, siendo inoficioso el análisis y pronunciamiento respecto de los otros supuestos que necesariamente deben concurrir. Así se decide.

DISPOSITIVO:

Por los fundamentos antes expuestos, este JUZGADO SEGUNDO DE PRIMERA INSTANCIA DE JUICIO DEL TRABAJO DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ZULIA, administrando justicia en nombre de la REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA y por autoridad de la ley, declara:

UNICO: IMPROCEDENTE la medida cautelar solicitada por los ciudadanos ALEJANDRA CAROLINA GORDONES MEDINA y CARLOS ALBERTO FEREIRA MEDINA, referida a la suspensión de los efectos del acto administrativo contenido en la Providencia Administrativa N° 0014-2013, en fecha 23 de enero de 2013, mediante la cual se declaro con “SIN LUGAR, la solicitud de Reenganche y Pago de Salarios Caídos por ellos incoada en contra de la Sociedad Mercantil REPORT ZULIA AGENCIA DE NOTICIAS, C.A.

PUBLÍQUESE y REGÍSTRESE. DÉJESE COPIA CERTIFICADA POR SECRETARIA.

DADA, FIRMADA Y SELLADA EN LA SALA DE AUDIENCIAS DE ESTE JUZGADO SEGUNDO DE PRIMERA INSTANCIA DE JUICIO DEL TRABAJO DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ZULIA, en Maracaibo, a los quince (15) días del mes de julio de 2.014. Años: 204 de la Independencia y 155 de la Federación.


SONIA MARGARITA RIVERA DELGADO
La Juez
OBER RIVAS MARTINEZ
El Secretario

En la misma fecha, se dictó y publicó el fallo que antecede.


OBER RIVAS MARTINEZ
El Secretario