REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
EN SU NOMBRE:
JUZGADO CUARTO DE PRIMERA INSTANCIA EN LO CIVIL, MERCANTIL Y DEL TRÁNSITO DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ZULIA.-
203° y 154°
EXPEDIENTE: 13895.-
DEMANDANTE: MERY JOSEFINA OLIVARES, venezolana, mayor de edad, titular de la cédula de identidad No. V-7.608.358, domiciliada en el Municipio Maracaibo del estado Zulia.-
DEMANDADOS: XIOMARA DEL VALLE MORENO OLIVARES, JOSÉ CHIQUINQUIRÁ MORENO OLIVARES, ELIZABETH BEATRIZ MORENO OLIVARES, MERY JOSEFINA MORENO OLIVARES, JESÚS JAVIER MORENO OLIVARES, MARÍA ISABEL MORENO OLIVARES, EDDY ENRIQUE MORENO OLIVARES y LORENA MARGARITA MORENO OLIVARES, venezolanos, mayores de edad, titulares de las cédulas de identidad Nros. V-9.114.046, V-8.500.118, V-7.772.505, V-7.772.510, V-10.406.843, V-10.407.982, V-8.507.652 y V-8.500.117, respectivamente, todos domiciliados en el Municipio Maracaibo del estado Zulia.-
MOTIVO: Declaratoria de Concubinato.
FECHA DE ENTRADA: doce (12) de agosto del año dos mil trece (2013).
Visto el escrito de contestación presentado en fecha catorce (14) de noviembre de dos mil trece (2013), por el abogado en ejercicio LEONARDO CHANGAROTTI, inscrito en el inpreabogado bajo el Nro. 141.745, actuando en su carácter de apoderado judicial de la parte demandada, y visto el convenimiento allí señalado este tribunal para resolver lo conducente pasa a hacerlo previas las siguientes consideraciones:
Resulta oportuno traer a colación la decisión dictada por la Sala de Casación Civil del Máximo Tribunal de Derecho, en fecha 10 de agosto de 2000, en el juicio de Inversiones y Construcciones U.S.A. C.A., contra Corporación 2150 C.A., expediente Nº. 99-340, donde se estableció lo siguiente:
“...los principios relativos a la defensa de orden constitucional y el debido proceso, imponen al juzgador dar aplicación a los principios procesales de saneamiento, relevancia o trascendencia, de nulidad esencial y el de Obligatoriedad de los Procedimientos Establecidos en la Ley, y como bien lo indica el procesalista, DEVIS ECHANDIA,
“…La ley nos señala cuáles son los procedimientos que se han de seguir para cada clase de proceso o para obtener determinadas declaraciones judiciales, sin que les sea permitido a los particulares, aún existiendo acuerdo entre todos los interesados en el caso, ni a las autoridades o a los jueces MODIFICARLOS O PRETERMITIR SUS TRÁMITES”.(DEVIS ECHANDIA, Hernando. Compendio de Derecho Procesal. Editorial ABC: Tomo I, Décima Edición. Pág. 39, Bogotá 1985) (Mayúsculas, negritas y subrayado de la Sala)
En lo referente al concepto de orden público, esta Sala, elaboró su doctrina sobre el concepto de orden público, con apoyo en la opinión de Emilio Betti, así:
“…Que el concepto de orden público representa una noción que cristaliza todas aquellas normas de interés público que exigen observancia incondicional, y que no son derogables por disposición privada. La indicación de estos signos característicos del concepto de orden público, esto es, la necesidad de la observancia incondicional de sus normas, y su consiguiente indisponibilidad por los particulares, permite descubrir con razonable margen de acierto, cuándo se está o no en el caso de infracción de una norma de orden público.
(…Omissis…).
A estos propósitos es imprescindible tener en cuenta que si el concepto de orden público tiende a hacer triunfar el interés general de la sociedad y del Estado frente al particular del individuo, para asegurar la vigencia y finalidad de determinadas instituciones de rango eminente, nada que pueda hacer o dejar de hacer un particular y aun una autoridad, puede tener la virtud de subsanar o de convalidar la contravención que menoscabe aquel interés, lo que equivaldría a dejar en manos de los particulares o autoridades, la ejecución de voluntades de Ley que demandan perentorio acatamiento”(G.F. Nº 119. V. I., 3ª etapa, pág. 902 y S. Sentencia de fecha 24 de febrero de 1983) (Subrayado y negritas de la Sala).
Mas recientemente, el Tribunal Supremo de Justicia en Sala Constitucional conceptualizó, en materia de Amparo Constitucional, el comportamiento que debe asumir el juez cumpliendo con la función tuitiva del orden público, de esta manera decidió:
“…Sin embargo, no escapa a esta Sala, como ya le ocurrió a la Sala de Casación Civil de la extinta Corte Suprema de Justicia y que plasmó en fallo del 24 de abril de 1998 al cual luego se hace referencia, que el conocimiento de unos hechos que no fueron alegados como supuestos de hecho de las normas constitucionales denunciadas como infringidas, pueden y deben producir otras situaciones a ser tomadas en cuenta por los sentenciadores, ya que a pesar de ser ajenas a la pretensión de amparo, siempre que sean cuestiones de orden público, sobre las cuales el juez puede de oficio resolver y tomar decisiones, si constata que las mismas no lesionan derecho de las partes o de terceros. Cuando los afectados por las decisiones han sido partes en el juicio donde se constatan los hechos contrarios al orden público, y ellos son generadores de esos hechos, el derecho a la defensa y al debido proceso no se les está cercenando si de oficio el juez cumpliera con la función tuitiva del orden público, ya que es la actitud procesal de las partes las que con su proceder denota la lesión del orden público, entendido éste como el ‘…Conjunto de condiciones fundamentales de vida social instituidas en una comunidad jurídica, las cuales, por afectar centralmente la organización de ésta, no pueden ser alteradas por voluntad de los individuos…’ (Diccionario Jurídico Venezolano D & F, pág. 57). La ineficacia de esas condiciones fundamentales generaría el caos social….” (Sentencia de la Sala Constitucional de fecha 9 de marzo de 2000, exp. Nº 00- 0126)...”. (Subrayado del Tribunal).
Ahora bien, esta operadora de justicia por cuanto observa que la presente causa trata de un juicio de DECLARATORIA DE CONCUBINATO donde se encuentra comprometido el orden público, en consecuencia, NIEGA el convenimiento presentado por el ciudadano LEONARDO CHANGAROTTI, antes identificado. Así se establece.
PUBLÍQUESE, REGÍSTRESE.-
Déjese copia certificada de la resolución por secretaría, conforme a lo dispuesto en el artículo 248 del Código de Procedimiento Civil.
Dada, firmada y sellada en la Sala de Despacho del Juzgado Cuarto de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del estado Zulia. En Maracaibo a los nueve (09) días del mes de enero del año dos mil catorce (2014).- Años: 203° de la Independencia y 154° de la Federación.-
LA JUEZA PROVISORIA,
Dra. INGRID VÁSQUEZ RINCÓN.
LA SECRETARIA,
MARÍA ROSA ARRIETA FINOL.-
En la misma fecha siendo las dos de la tarde (02:00 p.m.) se dictó y publicó el fallo que antecede signado con el Nº ______.-
LA SECRETARIA,
MARÍA ROSA ARRIETA FINOL.-
IVR/MRAF/gr.-
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