REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA






En su Nombre:
Circunscripción Judicial del Estado Zulia
Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes
Sala de Juicio - Juez Unipersonal Nº 2

CAUSA: DIVORCIO 185 A
PARTES: ERNESTO GONZALEZ ANDRADE y MIGDALYS SOTO PIRELA
Abogado : HUMBERTO VILLALABOS VILORIA

PARTE NARRATIVA

Consta de las actas que los ciudadanos ERNESTO GONZALEZ ANDRADE Y MIGDALYS SOTO PIRELA, venezolanos, mayores de edad, titulares de la cédula de identidad Nros. 9.716.458 y 10.411.340, respectivamente, ambos domiciliados en esta Ciudad y Municipio Autónomo Maracaibo, Estado Zulia, asistidos por la abogado en ejercicio HUMBERTO VILLLALOBOS VILORIA, inscrita en el Inpreabogado bajo el Nro. 56633, refiriendo que contrajeron matrimonio civil por ante la Jefatura Civil la Parroquia Cacique del Municipio Maracaibo del Estado Zulia, el día tres (03) de Noviembre de mil novecientos ochenta y cuatro (1.984), según se evidencia de la copia certificada del acta de matrimonio No 1197 que consignaron. Indican que procrearon dos (02) hijos que llevan por nombre ERNESTO JOSE Y CARLOS JOSE GONALEZ SOTO.

Recibida la anterior solicitud se admitió cuanto ha lugar en derecho el día ocho (08) de Julio de dos mil cuatro (2004), de conformidad con lo establecido en el primer parágrafo del artículo 177 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente, y se libró boleta de citación del Fiscal del Ministerio Público, y se ordenó la comparecencia de los adolescentes de autos

En fecha once (11) de Agosto de 2.004, se agregó boleta de ciatción del Fiscal del Ministerio Público.
PARTE MOTIVA
ÚNICO

Examinadas las actas procesales, observa este Tribunal que el proceso está paralizado desde el cinco (05) de Agosto de 2004; discurriendo el tiempo desde entonces sin ningún acto de procedimiento que movilice la relación jurídica procesal con el fin de alcanzar el acto jurisdiccional por excelencia, que es la sentencia definitiva como medio normal de terminación del proceso.

A tal efecto, el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil, dispone:
“Toda instancia se extingue por el transcurso de un año sin haberse ejecutado ningún acto de procedimiento por las partes”.

El autor argentino Hugo Alsina, explica de forma espléndida la figura de la perención, en su obra titulada Tratado Teórico Práctico de Derecho Procesal Civil y Comercial, segunda edición, IV Tomo, Juicio Ordinario, Ediar Soc. Anon. Editores, Buenos Aires, Argentina, 1961, Pag. 423 a 425, de la siguiente manera:

“1) Concepto.
a) El interés público exige que los procesos no permanezcan paralizados indefinidamente; no sólo porque la subsistencia de la litis es contraria al restablecimiento del orden jurídico, sino porque la relación procesal también comprende al órgano jurisdiccional, y esa vinculación no puede quedar supeditada en el tiempo al arbitrio de las partes, a quienes en materia civil corresponde el impulso del procedimiento.
b) Por eso, así como la prescripción se funda en una presunción de abandono del derecho, la inactividad de las partes importa una presunción de abandono de la instancia. El proceso se extingue, entonces, por el sólo transcurso del tiempo cuando los litigantes no instan su prosecución dentro de los plazos establecidos por la ley. Este modo anormal de extinción se designa con el nombre de perención o caducidad de la instancia, (de perimere, destruir, anular; instancia, impulso, obrar en juicio) y está reglamentado por la ley N°. 14.191”.
c) Anteriormente se consideraba a la perención como una pena al litigante, pero hoy se admite que cuando las partes dejan paralizado el proceso por un tiempo prolongado, es por que no tienen interés en su prosecución y que desisten tácitamente de la instancia, lo que autoriza al Estado a librar a sus propios órganos de todas las obligaciones derivadas de la existencia de una relación procesal”


Es decir, que la perención se basa en una condición objetiva, que consiste en el transcurso de un año de inactividad por las partes. Es así como se refleja la intención del legislador, de evitar que los juicios se prolonguen indefinidamente en el tiempo, como también de librar a los Tribunales del deber de dictar nuevas providencias en casos presuntamente abandonados por los litigantes.

Por las razones antes expuestas, el proceso ha perimido y se ha extinguido la instancia por caducidad procesal, que impide el libre acceso a la Jurisdicción y a la efectiva tutela judicial, habida cuenta que la parte demandante abandonó la actividad procesal y con ello hizo cesar el conflicto de intereses, toda vez que los juicios como enfermedad social, deben ser resueltos por la Jurisdicción en su función pública para establecer la Paz con Justicia; mas entonces, al abandonar el mismo la parte actora, hace cesar el conflicto en su propia voluntad por autocomposición procesal; y así se declara.
PARTE DISPOSITIVA
DECISION

Por los fundamentos expuestos, este Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, Sala de Juicio – Juez Unipersonal N° 2, Administrando justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley, DECLARA:
a) Perimida La Instancia en la solicitud de DIVORCIO 185 A intentada por los ciudadanos ERNESTO GONZALEZ ANDRADE Y MIGADALYS SOTO PIRELA ya anteriormente identificados.

No hay costas de conformidad con el artículo 283 del Código de Procedimiento Civil.

Publíquese. Regístrese. DéjeREPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA






En su Nombre:
Circunscripción Judicial del Estado Zulia
Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes
Sala de Juicio - Juez Unipersonal Nº 2

CAUSA: DIVORCIO 185 A
PARTES: ERNESTO GONZALEZ ANDRADE y MIGDALYS SOTO PIRELA
Abogado : HUMBERTO VILLALABOS VILORIA

PARTE NARRATIVA

Consta de las actas que los ciudadanos ERNESTO GONZALEZ ANDRADE Y MIGDALYS SOTO PIRELA, venezolanos, mayores de edad, titulares de la cédula de identidad Nros. 9.716.458 y 10.411.340, respectivamente, ambos domiciliados en esta Ciudad y Municipio Autónomo Maracaibo, Estado Zulia, asistidos por la abogado en ejercicio HUMBERTO VILLLALOBOS VILORIA, inscrita en el Inpreabogado bajo el Nro. 56633, refiriendo que contrajeron matrimonio civil por ante la Jefatura Civil la Parroquia Cacique del Municipio Maracaibo del Estado Zulia, el día tres (03) de Noviembre de mil novecientos ochenta y cuatro (1.984), según se evidencia de la copia certificada del acta de matrimonio No 1197 que consignaron. Indican que procrearon dos (02) hijos que llevan por nombre ERNESTO JOSE Y CARLOS JOSE GONALEZ SOTO.

Recibida la anterior solicitud se admitió cuanto ha lugar en derecho el día ocho (08) de Julio de dos mil cuatro (2004), de conformidad con lo establecido en el primer parágrafo del artículo 177 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente, y se libró boleta de citación del Fiscal del Ministerio Público, y se ordenó la comparecencia de los adolescentes de autos

En fecha once (11) de Agosto de 2.004, se agregó boleta de ciatción del Fiscal del Ministerio Público.
PARTE MOTIVA
ÚNICO

Examinadas las actas procesales, observa este Tribunal que el proceso está paralizado desde el cinco (05) de Agosto de 2004; discurriendo el tiempo desde entonces sin ningún acto de procedimiento que movilice la relación jurídica procesal con el fin de alcanzar el acto jurisdiccional por excelencia, que es la sentencia definitiva como medio normal de terminación del proceso.

A tal efecto, el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil, dispone:
“Toda instancia se extingue por el transcurso de un año sin haberse ejecutado ningún acto de procedimiento por las partes”.

El autor argentino Hugo Alsina, explica de forma espléndida la figura de la perención, en su obra titulada Tratado Teórico Práctico de Derecho Procesal Civil y Comercial, segunda edición, IV Tomo, Juicio Ordinario, Ediar Soc. Anon. Editores, Buenos Aires, Argentina, 1961, Pag. 423 a 425, de la siguiente manera:

“1) Concepto.
a) El interés público exige que los procesos no permanezcan paralizados indefinidamente; no sólo porque la subsistencia de la litis es contraria al restablecimiento del orden jurídico, sino porque la relación procesal también comprende al órgano jurisdiccional, y esa vinculación no puede quedar supeditada en el tiempo al arbitrio de las partes, a quienes en materia civil corresponde el impulso del procedimiento.
b) Por eso, así como la prescripción se funda en una presunción de abandono del derecho, la inactividad de las partes importa una presunción de abandono de la instancia. El proceso se extingue, entonces, por el sólo transcurso del tiempo cuando los litigantes no instan su prosecución dentro de los plazos establecidos por la ley. Este modo anormal de extinción se designa con el nombre de perención o caducidad de la instancia, (de perimere, destruir, anular; instancia, impulso, obrar en juicio) y está reglamentado por la ley N°. 14.191”.
c) Anteriormente se consideraba a la perención como una pena al litigante, pero hoy se admite que cuando las partes dejan paralizado el proceso por un tiempo prolongado, es por que no tienen interés en su prosecución y que desisten tácitamente de la instancia, lo que autoriza al Estado a librar a sus propios órganos de todas las obligaciones derivadas de la existencia de una relación procesal”


Es decir, que la perención se basa en una condición objetiva, que consiste en el transcurso de un año de inactividad por las partes. Es así como se refleja la intención del legislador, de evitar que los juicios se prolonguen indefinidamente en el tiempo, como también de librar a los Tribunales del deber de dictar nuevas providencias en casos presuntamente abandonados por los litigantes.

Por las razones antes expuestas, el proceso ha perimido y se ha extinguido la instancia por caducidad procesal, que impide el libre acceso a la Jurisdicción y a la efectiva tutela judicial, habida cuenta que la parte demandante abandonó la actividad procesal y con ello hizo cesar el conflicto de intereses, toda vez que los juicios como enfermedad social, deben ser resueltos por la Jurisdicción en su función pública para establecer la Paz con Justicia; mas entonces, al abandonar el mismo la parte actora, hace cesar el conflicto en su propia voluntad por autocomposición procesal; y así se declara.
PARTE DISPOSITIVA
DECISION

Por los fundamentos expuestos, este Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, Sala de Juicio – Juez Unipersonal N° 2, Administrando justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley, DECLARA:
a) Perimida La Instancia en la solicitud de DIVORCIO 185 A intentada por los ciudadanos ERNESTO GONZALEZ ANDRADE Y MIGADALYS SOTO PIRELA ya anteriormente identificados.

No hay costas de conformidad con el artículo 283 del Código de Procedimiento Civil.

Publíquese. Regístrese. Déjese copia certificada por Secretaría.
Dada, firmada y sellada en la Sala N° 2 del Despacho del Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, en Maracaibo, a los ( 26 ) días del mes de Marzo de dos mil diez. (2.010).199º de la Independencia y 151º de la Federación.
La Juez Unipersonal N° 2,

Dra. Inés Hernández Pina La Secretaria,

Abog. Militza Martínez Portillo.



En la misma fecha, siendo las 9:50 a.m., previo el anuncio de ley a las puertas del Despacho, se dictó y publicó la anterior sentencia Interlocutoria bajo el N° 337 . La secretaria.
Exp: 5752
IHP/ig*










se copia certificada por Secretaría.
Dada, firmada y sellada en la Sala N° 2 del Despacho del Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, en Maracaibo, a los ( 26 ) días del mes de Marzo de dos mil diez. (2.010).199º de la Independencia y 151º de la Federación.
La Juez Unipersonal N° 2,

Dra. Inés Hernández Pina La Secretaria,

Abog. Militza Martínez Portillo.



En la misma fecha, siendo las 9:50 a.m., previo el anuncio de ley a las puertas del Despacho, se dictó y publicó la anterior sentencia Interlocutoria bajo el N° 337 . La secretaria.
Exp: 5752
IHP/ig*