REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
PODER JUDICIAL
Tribunal Cuarto de Juicio del Circuito Judicial Laboral de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia
Maracaibo, veinte (20) de abril de dos mil siete (2007).
197º y 148º
ASUNTO: VP01-L-2006-001176
PARTE DEMANDANTE:
Ciudadano MERVIN ENRIQUE REYES AGUILAR, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad Nº 9.704.886 y domiciliado en el Municipio Autónomo Maracaibo del Estado Zulia.
APODERADA JUDICIAL DE LA PARTE DEMANDANTE:
Ciudadana CONSUELO PARRA, venezolana, mayor de edad, abogada en ejercicio, inscrita en el Instituto de Previsión Social del Abogado (INPREABOGADO) bajo el número 27.808.
PARTE DEMANDADA:
Sociedad Mercantil TRANSPORTE DE VALORES VISETECA, C.A., inscrita por ante el Registro Mercantil Segundo de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, en fecha de 25 de Agosto de 1997, bajo el Nº 33, Tomo 421-A Sgdo.
APODERADA JUDICIAL DE LA PARTE DEMANDADA:
Ciudadana EVELYN VALERO, venezolana, mayor de edad, abogada en ejercicio, inscrita en el Instituto de Previsión Social del Abogado (INPREABOGADO) bajo el número 26.446.
MOTIVO: PRESTACIONES SOCIALES Y OTROS CONCEPTOS LABORALES.
SENTENCIA INTERLOCUTORIA CON FUERZA DE DEFINITIVA:
HOMOLOGACION DE TRANSACCION LABORAL:
En el juicio que por prestaciones sociales y otros conceptos tiene incoado el ciudadano MERVIN ENRIQUE REYES AGUILAR, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad Nº 9.704.886 y domiciliado en el Municipio Autónomo Maracaibo del Estado Zulia, en contra de la Sociedad Mercantil TRANSPORTE DE VALORES VISETECA, C.A., (suficientemente identificadas); comparecieron ante este Tribunal para la celebración de la Audiencia de Juicio Oral y Pública, en fecha 29 de Marzo de 2007; la parte demandante, representada por su apoderada judicial, CONSUELO PARRA; y la parte demandada TRANSPORTE DE VALORES VISETECA, C.A., representada judicialmente por la abogada EVELYN VALERO, en la cual fueron expuestos los alegatos de ambas partes, evacuadas las pruebas, expuestas las observaciones finales y la ciudadana Juez hizo uso de la facultad que le confiere el artículo 103 de la Ley Orgánica Procesal del Trabajo, difiriendo la lectura del dispositivo para el quinto día hábil siguiente a la fecha antes señalada. El día 12 de Abril de 2007, día fijado por este Tribunal para dictar el dispositivo del fallo, la parte demandada TRANSPORTE DE VALORES VISETECA, C.A., indicó que ambas partes habían llegado a un acuerdo, por lo que se le cancelaría al actor la cantidad de Bs. 5.000.000,00; de manera que se abstuvo de dictar el dispositivo del fallo y se levantó el acta respectiva, dejando constancia de dicho acuerdo. En fecha 13 de Abril de 2007; la parte demandante, representada por su apoderada judicial, CONSUELO PARRA; y la parte demandada TRANSPORTE DE VALORES VISETECA, C.A., representada judicialmente por la abogada EVELYN VALERO; y en cumplimiento con lo dispuesto en el artículo 3 de la Ley Orgánica del Trabajo, y los artículos 10 y 11 de su Reglamento, en concordancia con los artículos 1.713 y 1.723 del Código Civil; ambas presentaron una transacción laboral formulando una relación circunstanciada de los hechos que la motivan y de los derechos en ella comprendidos; donde con el objeto de evitar los gastos y costos que pudieran generarse para las partes, en aras de evitar también el transcurso del tiempo que implica un proceso de esta naturaleza difícil y costoso; y constatada la existencia de derechos reclamados, litigiosos y contradictorios, susceptibles de ser objeto de una transacción; ambas partes, de mutuo y común acuerdo, a los fines de poner fin al actual proceso y de precaver un futuro y eventual litigio, convinieron en celebrar otorgándose recíprocas concesiones, la referida TRANSACCION LABORAL, sobre la controversia planteada; en la cual el demandante dejó expresa constancia que con el pago recibido, por medio de este negocio jurídico; de parte de la demandada, quedan satisfechas todas y cada una de las diferencias y reclamos existentes entre las partes, acuerdo éste, regulado en los términos y condiciones convenidos por ambas partes; ofreciendo LA PARTE DEMANDADA pagar AL DEMANDANTE la cantidad de CINCO MILLONES DE BOLIVARES CON CERO CENTIMOS (Bs. 5.000.000,00); y el ciudadano MERVIN ENRIQUE REYES AGUILAR expresa que en virtud de la transacción acordada, acepta la cantidad de dinero a recibir, los cuales serán cancelados de la siguiente manera: La cantidad de CINCO MILLONES DE BOLIVARES CON CERO CENTIMOS (Bs. 5.000.000,00), pago efectuado mediante cheque de la Institución Bancaria Banco Mercantil a favor del accionante, signado con el número 16064586, de fecha 11 de Abril de 2007, por la cantidad de Bs. 5.000.000,00, a nombre DEL DEMANDANTE. El ciudadano MERVIN ENRIQUE REYES AGUILAR declara, estar de acuerdo con dicha cantidad, recibiéndola y aceptándola por vía transaccional; y que la misma corresponde a la cancelación total y definitiva de las acreencias laborales en los términos antes expuestos. Asimismo, el actor manifiesta que acepta y recibe dicho dinero como pago único y definitivo de todos los conceptos que reclama, derivados de la relación de trabajo que lo vinculó con la accionada, el cual además incluye los conceptos reclamados, más la indexación o corrección monetaria, intereses moratorios, intereses sobre prestaciones sociales, así como cualquier otro concepto no previsto y de que a juicio del actor pueda corresponderle, por cuanto éstos le fueron cancelados en la oportunidad en la que se hizo acreedor de ello. Igualmente, el demandante acepta declara que recibe a su entera y total satisfacción el pago ofrecido, declarando además que con este pago nada queda por reclamarle a la demandada por los conceptos, ni por ningún otro derivado de las relaciones de trabajo que existió entre ambos. De igual modo, el pago ofrecido y aceptado en este acto cubre todos los conceptos correspondientes a las indemnizaciones conforme a la Ley Orgánica del Trabajo, por lo que ambas partes están contestes en admitir que queda expresamente excluida la aplicación de cualquier cláusula contractual, individual que se pretendiera hacer valer en el futuro, razón por la que, cualquier diferencia a favor de algunas de las partes, bien sea a favor de la demandada o del actor, será tomada en beneficio de la otra, de manera que no existe la posibilidad de reclamación posterior, todo en aras de mantener la armonía de las partes. Asimismo, el actor declara que durante la prestación de su servicio a la demandada, no tuvo, ni sufrió ningún daño moral o material causados por los dueños de ésta, sus empleados, obreros, o terceros relacionados con ésta, como visitantes, clientes o proveedores, que tampoco sufrió daños de ninguna especie, causados por bienes de la propiedad o que estuviesen en posesión de la accionada dentro o fuera de las instalaciones o en el lugar donde ejecutó sus trabajos. De esta manera, el actor declara que durante la relación de trabajo que lo unió con la demandada, no sufrió de ningún accidente de trabajo, ni de enfermedad profesional, y que la accionada siempre le advirtió los riesgos a los cuales pudio estar eventualmente sometido por la prestación de sus servicios, por lo que, expresamente declara estar en perfecto estado de salud. En consecuencia, los conceptos transados en la transacción son: Diferencias salariales, horas extras, bono nocturno, utilidades vencidas y fraccionadas, vacaciones y bono vacacional vencidos y/o fraccionados, incidencia de bono vacacional, fideicomiso, prestación de antigüedad, días feriados y de descanso trabajados y compensatorios, intereses de cualquier naturaleza, bonificaciones, corrección monetaria, y cualquier otra bonificación, indemnización, o prestación establecida por la ley, decreto, o mediante contrato individual.
CONSIDERACIONES PARA DECIDIR
Establece el artículo 89 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela:
1) “El trabajo es un hecho social y gozará de la protección del Estado. La Ley dispondrá lo necesario para mejorar las condiciones materiales, morales e intelectuales de los trabajadores y trabajadoras. Para el cumplimiento de esta obligación del Estado se establecen los siguientes principios:
2) Ninguna ley podrá establecer disposiciones que alteren la intangibilidad y progresividad de los derechos y beneficios laborales. En las relaciones laborales prevalece la realidad sobre las formas o apariencias.
3) Los derechos laborales son irrenunciables. Es nula toda acción, acuerdo o convenio que implique renuncia o menoscabo de estos derechos. Sólo es posible la transacción y convenimiento al término de la relación laboral, de conformidad con los requisitos que establezca la ley.
4) Cuando hubiere dudas acerca de la aplicación o concurrencia de varias normas, o en la interpretación de una determinada norma, se aplicará la más favorable al trabajador o trabajadora. La norma adoptada se aplicará en su integridad.
5) Toda medida o acto del patrono o patrona contrario a esta Constitución es nulo y no genera efecto alguno.
6) Se prohíbe todo tipo de discriminación por razones de política, edad, raza, sexo, o credo o por cualquier otra condición.
7) Se prohíbe el trabajo de adolescentes en labores que puedan afectar su desarrollo integral. El Estado los protegerá contra cualquier explotación económica y social.
Asimismo, la Ley Orgánica del Trabajo en su artículo 3 consagra:
“En ningún caso serán renunciables las normas y disposiciones que favorezcan a los trabajadores.
Parágrafo Único.- La irrenunciabilidad no excluye la posibilidad de conciliación o transacción siempre que se haga por escrito y contenga una relación circunstanciada de los hechos que la motiven y de los derechos en ella comprendidos. La transacción celebrada por ante el funcionario competente del trabajo tendrá efecto de cosa juzgada”. (Cursiva del Tribunal).
Igualmente, el artículo 10 y 11 del Reglamento de Ley Orgánica del Trabajo, disponen lo siguiente:
Artículo 10: Principio de irrenunciabilidad (Transacción Laboral). “De conformidad con el principio de irrenunciabilidad de los derechos que favorezcan al trabajador y trabajadora, contemplado en el numeral 2 del artículo 89 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en concordancia con el artículo 3 de la Ley Orgánica del Trabajo, las transacciones y convenimientos sólo podrán realizarse al término de la relación laboral y siempre que versen sobre derechos litigiosos o discutidos, consten por escrito y contengan una relación circunstanciada de los hechos que las motiven y de los derechos en ellas comprendidos.
En consecuencia, no será estimada como transacción la simple relación de derechos, aun cuando el trabajador o trabajadora hubiere declarado su conformidad con lo pactado. En este supuesto, el trabajador o trabajadora conservará íntegramente las acciones para exigir el cumplimiento de las obligaciones derivadas de la relación de trabajo”.
Artículo 11: Efectos de la Transacción Laboral. “La transacción celebrada por ante el Juez, Jueza, Inspector o Inspectora del Trabajo competente, debidamente homologada, tendrá efectos de cosa juzgada.
Parágrafo Primero: Cuando la transacción fuere presentada para su homologación, el funcionario o funcionaria competente deberá constatar el cumplimiento de los extremos del artículo anterior y cerciorarse que el trabajador o trabajadora actúa libre de constreñimiento alguno.
Parágrafo Segundo: El Inspector o Inspectora del Trabajo procederá a homologar o rechazar la transacción que le fuere presentada, dentro de los tres (3) días hábiles siguientes.
En el supuesto de negativa, deberá indicar los motivos de la decisión y, si fuere el caso, precisar los errores u omisiones en que hubieren incurrido los interesados, brindándosele a éstos el lapso de subsanación a que se refiere el artículo 50 de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos”.
De lo anteriormente expuesto, este Tribunal observa que en materia laboral, al ser los derechos debatidos de orden público, es irrenunciable el derecho por parte del trabajador a aquellas normas y disposiciones que lo favorezcan, según lo establece claramente el ya citado artículo 3 de la Ley Orgánica del Trabajo, pero dejando esta misma norma abierta la posibilidad de conciliación o transacción, siempre que se haga por escrito y contenga una relación circunstanciada de los hechos que la motiven y de los derechos en ellas comprendidos; es decir que la transacción o conciliación en materia laboral es posible siempre y cuando se respeten aquellos derechos de orden público que protejan al trabajador y tutelados por la Constitución Nacional, Ley Orgánica del Trabajo y su Reglamento.
A tal fin, la Ley establece una serie de requisitos de estricto cumplimiento para la validez de toda transacción o conciliación laboral:
1) Debe versar sobre derechos litigiosos discutidos,
2) Que consten por escrito;
3) Que contengan una relación circunstanciada de los hechos;
4) Cerciorarse que el trabajador actúa libre de constreñimiento alguno.
Estos requisitos fueron concurrentes hasta hace poco, cuando la Sala de Casación Social del Tribunal Supremo de Justicia, en sentencia de fecha 05 de Marzo de 2004, caso Cesar Augusto Villareal contra Panamco de Venezuela, S.A.; con ponencia del Magistrado Alfonso Valbuena Cordero, dejo sentado lo siguiente:
“Debe señalar ésta Sala que, de conformidad con lo previsto en el artículo 3°, Parágrafo Único de la Ley Orgánica del Trabajo, en concordancia con los artículos 9° y 10° de su Reglamento, cuando se lleva a cabo una transacción laboral que es, homologada por la autoridad competente del trabajo, vale decir, Juez o Inspector del Trabajo, la misma adquiere la eficacia de cosa juzgada referida en el citado parágrafo único del artículo 3 de la Ley Orgánica del Trabajo, porque al ser presentada ante cualquiera de las autoridades del trabajo ya indicadas, éstas verificaran si la misma cumple o no con los requerimientos para que tenga validez y carácter de cosa juzgada.
Si bien es cierto que en el parágrafo primero del artículo 10 del Reglamento de la Ley Orgánica del Trabajo, se establece que al serle presentada una transacción al Inspector del Trabajo, éste debe verificar si se cumplen con los requisitos de Ley y constatar que el trabajador actúa libre de constreñimiento, hay que precisar que ni dicha norma ni ninguna otra establece que, como formalidad esencial, que el auto de homologación impartido a la transacción debe contener la indicación expresa de haberse cumplido tal requisito, y el hecho que tal extremo no se indique expresamente en el auto de homologación no permite concluir que el funcionario del trabajo no cumplió con el mismo, menos aún, cuando ni siquiera la parte accionante alega tal circunstancia…”. (Cursiva del Tribunal).
En consecuencia, esta Sentenciadora, observa que en el presente caso se cumplen los requisitos legales que hacen procedente la homologación de la transacción celebrada entre las partes en esta causa con miras a poner fin al presente juicio, por lo que de manera consecuente se procederá a homologar tal y como se expresará en el dispositivo del presente fallo dicho medio de auto composición procesal. Así se establece.
DISPOSITIVO:
Por los fundamentos antes expuestos, este JUZGADO CUARTO DE PRIMERA INSTANCIA DE JUICIO DEL TRABAJO DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ZULIA, ADMINISTRANDO JUSTICIA EN NOMBRE DE LA REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Y POR AUTORIDAD DE LA LEY, DECLARA:
1.- SE HOMOLOGA LA TRANSACCION celebrada entre el ciudadano MERVIN ENRIQUE REYES AGUILAR y la Sociedad Mercantil TRANSPORTE DE VALORES VISETECA, C.A., (ambas partes suficientemente identificadas en las actas procesales) y en consecuencia se le imparte el carácter de Cosa Juzgada, a dicho mecanismo de autocomposición procesal.
2.- NO HAY CONDENATORIA EN COSTAS dada la naturaleza del fallo y por haberlo así convenido las partes.
3.- Se ordena el archivo definitivo del expediente y se declara Terminado el presente procedimiento.
Publíquese y Regístrese. Déjese copia certificada por Secretaría del presente fallo de conformidad con lo dispuesto en el artículo 248 del Código de Procedimiento Civil, en concordancia con lo establecido en el artículo 1.384 del Código Civil y a los fines legales previstos en los ordinales 3° y 9° del artículo 72 de la Ley Orgánica del Poder Judicial.
Dada, firmada y sellada en la Sala de Audiencias de este Juzgado Cuarto de Primera Instancia de Juicio del Trabajo de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, en Maracaibo, a los veinte (20) días del mes de abril de 2007. Años: 197° de la Independencia y 148° de la Federación.
LA JUEZ,
ABOG. BREZZY MASSIEL AVILA URDANETA.
LA SECRETARIA,
ABOG. YOCELYN BOSCAN LUZARDO
En la misma fecha siendo las diez y catorce minutos de la mañana (10:14 a.m.) se dictó y publicó el anterior fallo.
LA SECRETARIA,
ABOG. YOCELYN BOSCAN LUZARDO
BAU/kmo.-
|